Quien no ha caminado un camino, tampoco es capaz de reconocerlo y mucho menos entenderlo...
Y algo que es tan evidente, en la mayoría de los casos, a muchxs, les resulta muy difícil, verlo o comprenderlo. ¿Qué quiero decir con esto? Que necesita ser explicado.
Esta reflexión solo es el principio de mi concepto de idea de vida, basado en varios movimientos que representan el concepto incierto e imperfecto del ser humano como tal, siempre se suele decir aquello de:
No juzgues mi vida, si no las has andado con mis zapatos.
Por ese mismo motivo, es interesante mostrar los aspectos más relevantes de la naturaleza de la vida de las personas, para que así desandando, reandando o imaginando el camino en diferentes tiempos, los lectores sean capaces de ponerse unas botas a veces incomodas y con piedras dentro de las mismas.
En marcha...
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