domingo, 6 de septiembre de 2015

Autoestima.

Realmente no era un hombre egoísta, sencillamente se había pasado treinta años de su vida dándoselo todo a los demás, se lo daba a quienes lo merecían e incluso a los que no lo merecían. Ahora, ya no le nacía de las entrañas darle nada a nadie más, ahora lo único que le nacía era darse a si mismo, todo aquello que no se había dado.

No era una cuestión de egoísmo, sino de elección, y era más que lícita porque llegó su momento.

Ya volverán los tiempos altruistas.


Yo soy yo y vosotros sois vosotros.

miércoles, 26 de agosto de 2015

La vida es "un poco" de cada cosa...


Nos pasamos la vida cargados de trabajo y obligaciones a la espera de resultados futuros... pero nos equivocamos, nuestro aguante es limitado. Acabamos estresados, aborrecidos y deprimidos siempre pensando que no tenemos tiempo para nada... pero la realidad es que no "sacamos tiempo" para aquello que de verdad amamos hacer.

La vida es eso... un poco de trabajo, un poco de ejercicio, un poco de amigos, un poco de familia, un poco de pareja, un poco de ocio, un poco de estudio, un poco de lectura, un poco de descanso, un poco de... etc. No hay que pasar el día haciendo una o dos cosas solamente, sino un poco de lo "que se pueda", cuando se pueda y como se pueda...

En pocas palabras, una vida equilibrada, lejos del perfeccionismo y del hedonismo, un equilibrio que nos permita vivir un poco de todo cada día.



martes, 25 de agosto de 2015

Átomos.


"En proporción a la extensión del universo, los átomos que nos forman, llevan juntos una eternidad"


"Cúmulos neuronales"

domingo, 23 de agosto de 2015

La belleza del momento.

Viajando aprendí que solo los momentos, son tiempos sin tiempo y que los lugares que podemos llegar a amar  están conectados solo a nuestra verdadera esencia. Observaba esos espacios y no podía sentir más que gratitud por la belleza que desprendían los tonos de los paisajes que en ellos yacían, era una belleza tan poderosa que fotografiarla hubiera sido un acto de egoísmo, porque en ese movimiento, le hubiera robado toda su luz...

Así, no quise conformarme con una imagen delimitada de la belleza, sino con un recuerdo que diluido en los días iría perdiendo nitidez y solo podría recuperarla visitando de nuevo esos lugares, en otros tiempos sin tiempo, en otras eternidades continuas.

Nada puede ser perfecto, pero por contra, en ese momento efímero y solo en ese momento, podría haber sido feliz.


"Retorno"

Aceptación.

... ¿Los puedes oír? ¿Puedes advertir a los perros salvajes que ladran en tu sótano? Eres humano, demasiado humano...

lunes, 17 de agosto de 2015

Una vida sin necesitar vacaciones...



"Vivo una vida de la que no necesito vacaciones..." 


Como dice una personita muy importante que yo conozco: "vivamos en el sintiempo"... y es que ese el problema, las prisas... pero, ¿cómo podemos vivir sin prisa, sin necesitar vacaciones? Esa y solo esa, es la cuestión...

Vivimos nuestras vidas siempre pensando que "cuando consigamos aquello o lo otro" podremos ser felices... vivimos aguantando y sufriendo para luego tener un trozo de vida y de pastel que al final resulta efímero. Esperamos las vacaciones para ser felices, esperamos el fin de semana para descansar, y de lunes a viernes soportamos todo los que no echen hasta estar rendidos y esa no es la solución... no se compensan seis meses de excesos en dos semanas.

Así que la solución es sencilla, haz entre semana lo que harías el fin de semana, esa barbacoa con los amigos después del trabajo, esas cañas hasta que anochezca, esos momentos para disfrutar de lo que sea ama y más importante aún... no preocuparse por el tiempo y por las obligaciones, pueden cumplirse cuatro días, pero el quinto elegiremos ser felices haciendo los que nos plazca... ya decía Sócrates que los ratos de ocio siempre son las mejores adquisiciones que podemos hacer.

No esperes a la vacaciones para viajar, un fin de semana largo puede convertirse en una aventura sin planificar... carretera, manta y desconexión, no hay otro secreto más que el de descubrirle nuevas sensaciones a nuestro cerebro y eso cuando más se consigue, es desapareciendo en otros contextos y lugares... 

Una vez hecho esto, llegan las vacaciones y te das cuenta que no las necesitabas... pero eso no significa no hacerlas, sino no dedicarlas a uno/a mismo/a o a viajes más largos...  pero sobretodo enfocarlas a la introspección, al conocimiento interior, a viajar en soledad, donde por esa misma tesitura el trabajo y el crecimiento personal convergen en resultados exponenciales y sorprendentes. Porque al final, todos los viajes acaban en un mismo lugar, en casa, en uno/a mismo/a.

Solo hay una vida, no la malgastes sin hacer aquello que verdaderamente te apasiona, sino puede ser en lo laboral, que sea en lo personal... pero que sea. Y cuando vuelvas de esos momentos de ocio... no seas la misma persona que se fue.



"Olores de vida plena...
pies descalzos,
domingo desde las tres..."


lunes, 10 de agosto de 2015

Tango

"Bailaremos tangos en gravedad cero... así, solo nos tendremos que limitar a juntar los cuerpos."


sábado, 27 de junio de 2015

El amor no lo cura todo...

 
"La movida es que confundís el amor 
con una mezcla de necesidad, egoísmo
y cuatro versos de mierda que habéis 
escuchado en algún disco."

Comenzamos con los pies en el suelo... 

El amor... es algo muy diferente a lo que cree la mayoría, tema estrella como no me cansaré de decir. El amor es una de las mejores cosas que, por así decirlo, puede sentir el ser humano, nace de un estado evolutivo, como casi todo... es el producto que nace de lo que llamamos "enamoramiento", fase muy necesaria para crear el vínculo entre dos personas que sienten atracción y que facilitará la procreación... pero, no quedará solo en el acto biológico puramente dicho, sino que se expandirá en un sentimiento que podrá durar un tiempo largo e indeterminado.

Pero existe un problema con el amor... estar enamorado y sentir amor es una experiencia tan maravillosa, que todo el mundo quiere repetir, incluso hay quien se obsesiona con esa sensación, quien se vuelve adicto o adicta a la misma... ya decía #Pascal, que ha fuerza de hablar de amor uno llega a enamorarse... y así es, a veces incluso en exceso...
Los casos más curiosos siempre se dan en la consulta, varios psicólogos quisieron poder ayudar a personas que llegaban como refugiados de zonas de guerra, donde habían tenido que ver muertes y torturas atroces, esperando que esas personas llegaran traumatizadas por esos actos. Cuando se les preguntaba que les angustiaba casi todas ellas comentaban temas relacionados con el amor como: "la persona que me gusta, se ha enamorado de mi amiga"... "que si tal o cual, siente algo por mi y eso me incomoda", todos temas relacionados con el amor...

Podemos decir que existe una máxima: pocas cosas son más importantes que el amor para un ser humano, y hasta ese punto, esta bien, porque es nuestra naturaleza... el problema acaece cuando le pedimos al amor, lo que el amor no puede darnos.

El amor, por desgracia, no lo cura todo...

Toca ser realistas y poner los pies en el suelo... el amor es una cosa más que sentir de muchas en esta vida y todas ellas tienen una función experiencial, a veces hay que sentir dolor para aprender una lección, a veces es a través de la tristeza, a veces a través de la rabia y es lícito poder aprender a través de estas emociones, incluso el miedo tiene función biológica que no es otra que protegernos, y todo ello es recomendable ser sentido, porque sentirlo nos enseña y nos cura las heridas...

El problema llega cuando sentimos tristeza, dolor o miedo... y enseguida queremos sentir alegría para no tener que sentirnos mal o no tener que sufrir, es una reacción muy humana, pero eso solo calmará momentáneamente el problema y entonces llegamos al quid de la cuestión, ¿por qué la gente cree que el amor lo cura todo? porque el amor es la manera más potente que tenemos de conectar con la alegría, con el buen rollo, con las endorfinas, con el sentido de la vida y con el bienestar... pero no debemos hacerlo a costa de tapar nuestras heridas abiertas porque por un lado u otro brotará la mierda que no se superó.

Un caso práctico de ello es la dependencia emocional, donde para no afrontar ciertos miedos, principalmente a la soledad, las personas se conectan al amor y parece que por un tiempo sus miedos y problemas se difuminan, ¿pero, a costa de qué? a costa de sobrecargar con sus miedos e irresponsabilidad a sus parejas, cosa que en un 90% de los casos acabará mal.

Otro caso interesante es el de las personas muy heridas por el desamor, por carencias afectivas o incluso por abusos o maltratos infantiles/adolescentes. En estos casos las personas buscan que sean sus parejas quien resuelvan sus heridas, se quedan enganchadas al concepto del amor, lo idealizan, creyendo erróneamente que sus parejas harán por ellas lo que ellas no pueden hacer por sí mismas, o dicho de otro modo... que el amor con tiempo todo lo cura, pero no hay una creencia más equivocada que esta. Al final solo conseguirán que sean sus parejas quienes paguen sus heridas, si tienen suerte encontrarán personas sumisas y masoquistas que se lo permitan, pero en ningún momento resolverán sus problemas, siempre habrán picos porque la solución jamás sera haber creado una cicatriz a la herida con un aprendizaje posterior que permita de nuevo amar con salud, sino que la no solución será tener una persona al lado que aguante su maltrato psicológico... pero como dice #Riso, nadie es víctima del amor si su propio consentimiento... todo acaba resumido, una vez más en falta de responsabilidad.

Una situación cruel, 
solo por pensar equivocadamente
que el amor todo lo cura...


Yo creo que a veces hay que tener la costumbre de morir de amor joder, ¿por qué no?... hay que intentarlo, hay que arriesgarse, hay que hacerlo... solo por darse el gusto de resucitar, renovado y reforzado, porque de todo se aprende y el amor que es algo maravilloso nos dice, que por suerte las cicatrices nos enseñan pero también lo hacen las caricias...


Por último y no menos importante, como diría #Blau, si tu pasado es oscuro... no puedes pedirnos a los demás que le pongamos farolas, ese trabajo, es solo tuyo y el amor no te va a solucionar nada, deberás transitar otras muchas emociones, muchas de ellas no serán agradables, pero esas, justamente esas te enseñaran las lecciones más importantes... y quien sabe, quizá un día vuelvas a amar de verdad, libre, como los incendios... que no tiene dueño.

Y no, esa música de la radio de esos canta-autores tan románticos y melosos... no esta hablando de una realidad absoluta, sino más bien de una situación dentro de una vida, donde habrá muchas otras situaciones con otras muchas sensaciones...

La vida no es solo amor,
es una mezcla de todas las
posibles emociones...


No somos hijos de sonidos imposibles...


No, no somos hijos de sonidos imposibles, técnicos, artificiales y sobretodo sintéticos. Gozamos de las cajas de ritmos llenas de sonidos tribales, bombos, y platillos distorsionados como jamás imaginamos.
Aún así, lo disfrutamos, son sonidos agonistas a nuestros receptores del placer, melodías como cantos de pájaros, bajos como truenos, como golpes estridentes en un yunque...
Todo tiene un sentido, como la correlación lógica de sentidos que iguala a la de movimientos repetitivos de una azada en la manos de un ser humano.

Somos, al final, lo que somos... producto de nuestra existencia.


viernes, 26 de junio de 2015

¿Qué es la mente?

La mente solo es la función de un órgano, el cerebro. Si el cerebro representara una rueda, la mente seria el giro de la misma, por ende no se puede localizar en ninguna parte, solo el órgano se localiza, el giro es el acto de la rueda. La mente es el cerebro en funcionamiento.

La mente no es un producto escondido, 
no esta en ninguna parte.

Entendemos el mundo con el cerebro, es aquello que nos hace consciente del mundo y de nosotros mismos, incluso de nuestro cuerpo. La realidad, es una interpretación cerebral para conocer el mundo exterior, así que la realidad es una construcción humana que solo existe en nuestras mentes, en la realidad, el mundo es materia y energía, nada más.

El cerebro nace de una realidad cambiante a la que debemos adaptarnos, sin esa realidad cambiante el órgano cerebral no tiene función ni misión de existir y como el apendice se vuelve obsoleto.

Estamos creando un mundo estático...
un mundo sin necesidad de función cerebral.

miércoles, 17 de junio de 2015

Crow

Es dudoso que el género humano logre crear un enigma que el mismo ingenio humano no resuelva.Tal vez sea la propia simplicidad del asunto lo que nos conduce al error. ‪#‎Poe‬

sábado, 16 de mayo de 2015

El amor es otra cosa...


Amar es ofrecer, quien ofrece amor recibe amor
es así de fácil. (D.)


 Siempre digo que el amor romántico es un amor dulce sin medida, empalagoso, loco, ciego y representado por el enamoramiento, pero en realidad el amor no es eso, solo es una parte del mismo porque en el mundo... 

...hay muchas cosas dulces, pero luego tenemos la mermelada de naranja amarga...
 
Y es en la mermelada de naranja amarga donde encontramos la justa medida de dulzor y amargor, siendo así como descubrimos un amor maduro, real, incierto y marcesible... o dicho de otro modo, un amor en el que se debe asumir que al igual que una flor, podrá marchitarse y al igual que todo lo que existe en el mundo será impermanente, un día u otro acabará. 

Aceptar esa realidad nos libera de un romanticismo esclavo y nos permite ver la realidad más cruda que implica una sola verdad: hay que vivir el momento mientras este ciclo de amor dure... porque mañana sea por el motivo que sea, quizá no exista para disfrutar de él. 

El romanticismo implica "querer"... que me den satisfacción, porque elevamos e idealizamos tanto el propio amor que creemos que no tendrá fin... lo anhelamos de forma continuada. En cambio, el amor maduro implica asumir la realidad de que el amor, un día u otro puede acabar... y eso nos libera dándonos la oportunidad de "amar" que implica dar al otro por el simple placer de ofrecer lo que llevamos dentro...

Cuando hablo de amor real y maduro, hablo de "crear nuevas emociones y sensaciones para la persona amada, pero no solo para que las disfrute, sino también para que si es necesario, las transite y en algunos casos incluso puedan doler.'' 
Como humanos imperfectos es esa la realidad que nos condiciona, por más que amemos, haremos daño sin intención, como cuando nos damos una martillazo en la mano que aguanta el clavo... pero eso nos enseña a crecer, juntos.

Y es que el amor romántico, no lo es todo en una relación de amor y no siempre puede ser maduro, pero el amor maduro sí puede ser romántico, porque a este tipo de amor, solo los amantes, aquellos que dan amor y aman, pueden sobrevivir...

Es poder decir: "Gritame fuerte, muy fuerte todos tus defectos... porque te voy a querer a pesar de ellos, a pesar de ti, porque no somos perfectos."


"Amarte cuando te deprimas, porque desprendas olor a flores ácidas,
amarte en todo momento y más aún, viendo llegar el final..."
(D.)



Hace falta valor para amar así, creedme...
 

viernes, 15 de mayo de 2015

Dominación/Sumisión


El poder y la autoridad de una persona dominante 
no se mide en los demás, sino en si misma.
(D.)


Dominación y sumisión son dos roles aplicables tanto a lo sexual como a lo social, son meras máscaras caracteriales que marcan una danza o juego entre los individuos que la practican. Estos dos roles, aunque muy complementarios, son las dos caras de una misma moneda y los miembros que los practican, a menudo los intercambian para beneficiarse del placer que producen sus rasgos.

Históricamente hemos vivido ciertas épocas donde la mujer dependía económicamente del hombre para sobrevivir, absorbía esa creencia y la transmitía, por contra el hombre ofrecía una estabilidad económica pero no sabía cuidar de si mismo, como si de un niño que pasaba de la madre a la esposa se tratara. Por todo esto a los varones les cuesta relacionarse en un plano de igualdad, y por esto las parejas también están en crisis. El modelo de relación basado en la dominación y la sumisión ya no funciona,  las mujeres pueden ganarse la vida y no necesitan un hombre para sobrevivir. La liberación de las mujeres ha logrado que no se relacionen ya desde la necesidad de tener un hombre que las cuide, sino desde la libertad.

El ser dominante puede caracterizarse por su escisión con las emociones, vive de cabeza para arriba y determina las emociones como una debilidad, no sonríe, pues la alegría no debe ser expresada, no muestra ira porque implicaría demostrar una perdida de control y jamás asumirá su miedo que es la máxima expresión de la vulnerabilidad.
En cambio, podrá ofrecer un nivel de control altísimo y absorber o asumir la responsabilidad de otros, por ello el ser sumiso se rendirá a él de forma voluntaria, habiendo una traspaso de responsabilidad que lo libere, alimentando el ego del dominante, que a su vez sentirá cierta grandeza... la que no es capaz de demostrarse a sí mismo y necesita extraer de los actos de los demás.
La persona dominante, se sentirá atraída por personas vulnerables y tímidas, dado que implicarán una sumisión más fácil y rápida, en cambio para la persona sumisa el carácter controlador del dominante implica una cura a su vulnerabilidad, a su miedo, porque al desprenderse de ella siente libertad como parche a su dolor, un dolor que surge por una mala gestión de la responsabilidad. Entre los dos cierran un círculo perfecto de relación y mientras exista ese circulo se hacen cargo el uno del otro de sus carencias, pero cuando se rompe ese círculo, llega el problema y deben caminar de nuevo sin muletas... y es cuando pueden tropezar con sus carencias emotivo-afectivas, vislumbrando la necesidad del otro.

 En general, podemos ver juegos de dominación/sumisión a diario, en lo que yo llamo "la falsa dominante". Así, en muchas mujeres se puede ver un carácter dominante muy marcado exclusivamente en el hecho verbal y físico, ocultan la vulnerabilidad tras su máscara o rol para dar una leve sensación de dominación, tantean el terreno, expresándose de forma contundente frente aquellos hombres que creen dominantes, sabiendo instintiva e inconscientemente que si los agreden de forma verbal o física, ellos responderán sometiéndolas y así descubriéndose. Este caso también se da en hombres sumisos, son aquellos que llaman constantemente la atención de las mujeres que ellos creen dominantes, no se relacionan con ellas de igual a igual, sino a través de la burla o el humor, el objetivo es llevarlas a su terreno y así someterse a ellas sin mostrar su vulnerabilidad en publico, estos casos son muy típicos de la adolescencia y de la juventud. En este caso las feromonas cumplen una función esencial.

Dominación y sumisión, son caracteres lícitos, pero no por ello trabajables y mejorables, no negaremos que estos juegos como dinámica sexual pueden ser divertidos porque existe una clara pulsión instintiva y un aprendizajes a nivel de creencia social muy profundo que lo impulsa y por ello son justificables normalmente. Las relaciones de dominación y sumisión ya no solo son la mascara de un rol sino una pulsión o juego sexual, aunque como forma de vida continuada puede ser peligroso e insano. 
Al enamorarnos, mostramos emociones y con ella una vulnerabilidad real, podremos ser heridos y si tenemos miedo al dolor, evitaremos mostrarlo... pero es ahí, asumiendo ese riesgo donde el dominante empieza a curarse, en cambio para la sumisa es trabajar justo lo opuesto, el control y la autosuficiencia.

El trabajo para las personas sumisas y el dominantes, es llegar a un punto de equilibrio donde se puedan relacionar con los demás de forma democrática a nivel social. Si no se hace este trabajo pueden aparecer problemas personales importantes llegados a la madurez, dado que en el momento que un individuo debe caminar solo y sin depender de nadie, no podrá hacerlo, el dominante no gestionado no podrá cuidar de si mismo y la sumisa no gestionada vivirá el dolor de las relaciones no deseadas, cayendo ambos en una espiral de dependencia emocional continuada.
El verdadero ser dominante, debe ser capaz de poner esa energía de control, para gestionar y dejar fluir sus impulsos de una manera sana y situacional, dominar su ego y ponerlo a su favor frente a la vida. El ser sumiso debe trabajar su miedo y responsabilizarse de si mismo, de su protección y de su vida.. En los dos caso podemos ver una inseguridad enorme que se transforma en un carencia a la hora de vivir, cosa que a podido ser provocada por la ausencia de uno de los dos miembros paternos, en especial el padre. Es el padre el que saca al niño/niña al mundo, no tenerlo o tenerlo de forma muy ausente como pasa en los actuales divorcios y en la antigua sociedad capitalista donde el padre trabaja muchas horas y la madre cuidaba de los hijo, crea una carencia emocional y educativa, los mismos actúan de dos modos, o se convencen que no necesitan el afecto y la seguridad del padre para sobrevivir y se vuelven autoexigentes, controladores y dominantes, o por contra se rinden a su vulnerabilidad y crean relaciones de dependencia con cualquier miembro de la sociedad para superar su vulnerabilidad, convirtiéndose en seres sumisos.

En conclusión, todo llevado al extremo puede ser una carencia, por naturaleza los seres humanos somos lo que somos, pero esas carencias, esas muletas, nuestros agujeros emocionales pueden ser resueltos para vivir una vida mucho más equilibrada y autosuficiente, sin necesidad de buscar en los otros lo que podemos darnos nosotros mismos.
Cabe destacar que sumisión y dominación no entienden de genero y tanto mujer u hombre pueden conjugar cualquiera de los dos roles o mascaras, aunque hay muchas cosas que cambiar en ambos géneros tal como el hombre debe vivir con su vulnerabilidad, la mujer debe romper las cadenas del "condicionamiento", como indica muy acertadamente Emila Pardo Bazán en la siguiente afirmación:

“La educación de la mujer no puede llamarse tal educación, sino doma, 
pues se propone por fin la obediencia, la pasividad y la sumisión
Emilia Pardo Bazán



Como última reflexión os plantearé una cuestión muy importante: ¿Creéis correcto o natural tener la necesidad de maltratar físicamente o dejarse maltratar por otro ser humano y sentir placer por ello? 

domingo, 26 de abril de 2015

Enamorarse de las palabras.


Si lo que vas a decir no es más bello que el silencio... 
no lo digas.


Y me pregunto, ¿dónde están esas mujeres que se enamoran de las palabras?

Que te miran y te sientes como una cometa zarandeada por un céfiro de bóreas, que poseyendo la delicuescencia, usan esos vientos para mandar sobre las aguas, dejándolas caer a modo de chispas sobre las palabras escritas en papel. Un papel, que al calarlo huyen de él, como lo hace la tinta etérea de mis palabras afanadas por la lluvia...

Valquirias de escarcha que besan los versos, enamorándose de la belleza sinfónica y meliflua de sus silabas dulces, jugando en un baile sonámbulo de letras y silencios, donde de forma azarosa, descubren delicadas emociones que se encierran en una serendipia de fibras y cuerpos entretejidos.

Cazadoras certeras de románticas e inconscientes limerencias, enamoradas de un amor que no pueden intuir sino trascendiendo los significados de los verbos en una epifanía de símbolos, unicamente representados como presas de la iridiscéncia tonal del silencio.

Sosiegos de silencios en soledad pero débilmente luminiscentes, que al intentar ser pronunciados amanecen como una aurora de tonos insolubles, solo visibles durante el interludio que dura la voz lírica de aquellas guerreras, que observan sin temor, como poco a poco ese silencio desaparece en un  efímero arrebol.

Ellas... son ninfas de elocuencia incandescente y volcánica que al conciliar mis sueños, los conmueven y los deleitan, haciendo con ello fluir los vocablos en una efervescencia de inspiración. Son dueñas y musas de las voces, sintiendo y fijando los espacios entre ellas de forma inalterable... y así, convirtiendo cada una de mis palabras, en un desenlace botánico e inmarcesible.


Mujeres solo descritas por lo inefable,
que deben ser amadas sin ningún prejuicio
 y con mucha terquedad.




Dedicado a S., por inspirarme, por enamorarse de la belleza de las palabras y por oler a naranja amarga.

martes, 31 de marzo de 2015

La mujer maltratadora - El tabú silenciado

A todos los hombres humillados
por sus mujeres y discriminados por la sociedad
.



La mujer maltratadora
El tabú silenciado
 

Todos conocemos el grave problema del maltrato físico o emocional que muchos hombres infligen a sus mujeres. Pero hay también otra plaga, no menos extendida, que es la violencia emocional o física de muchas mujeres contra sus parejas masculinas. Como ya existe abundantísima información sobre el primer asunto, examinaremos aquí con cierto detalle el segundo -un drama tabú-, a fin de obtener una visión más completa de la terrible violencia doméstica.
Ante todo, cabe entender toda violencia familiar como un síntoma neurótico surgido de profundos conflictos emocionales de sus miembros, y a menudo de severas patologías de la personalidad. En el caso de las mujeres, además, es un hecho que muchas de ellas no se emparejaron desde un principio a partir de un genuino amor a su pareja -y ni siquiera al varón en general o con unas mínimas aptitudes para la empatía y la convivencia-, sino desde apremiantes necesidades prácticas o neuróticas (p.ej., huir de la familia, vacíos emocionales, embarazo no deseado, deseo de tener hijos, interés económico, imitación social, etc.). Así, tras las primeras semanas de romance y en cuanto la mujer asume su nuevo estatus de casada (o incluso desde mucho antes), muchas de ellas comenzarán a descargar sus amarguras inconscientes contra su chivo expiatorio más cercano: sus maridos. (Y, por supuesto, también contra sus hijos u otras personas e incluso contra sí mismas. Pero éste es un tema que no abordaremos aquí). Comenzará, entonces, la pesadilla secreta de los hombres maltratados.

La conducta de estas mujeres es siempre la misma: culpan de forma exclusiva, continua y desproporcionada a sus parejas masculinas de los problemas inherentes a toda convivencia, presentándose ellas mismas como las víctimas ajenas e inocentes de todo. No hay diálogo, no hay autocrítica, no hay afecto, no hay disculpas; la percepción de la mujer es siempre inequívoca y furiosa: "¡es por tu culpa, eres un egoísta, eres un inútil, eres un idiota, eres un desagradecido, eres un hp...! Y desfoga inagotablemente contra él toda su rabia y su desprecio.
Si el hombre se muestra cariñoso, se burla de él ("eres un pesado, eres un crío, siempre estás con el sexo, sólo piensas en ti"). Si se defiende, entonces lo amenaza ("a mí no me hables así, tú qué te has creído, te denunciaré"). Si se repliega sobre sí mismo para protegerse, se queja ("no me haces caso, me tienes abandonada, nunca me has querido"). Y si el hombre, demasiado inmaduro y dependiente de la figura femenina (a causa de sus carencias maternales y sexuales), se rinde definitivamente y se somete mansamente a su mujer, entonces ella aún lo detesta más ("eres débil, eres patético, un calzonazos, me das asco"). Etcétera. De modo que, haga él lo que haga, ella siempre encontrará la manera de deformar la realidad para justificar su compulsiva necesidad de agredirlo y humillarlo.

En los casos moderados, estas mujeres son simplemente mandonas, exigentes, desdeñosas y manipuladoras con sus parejas. Cuando, en cambio, su narcisismo es ya patológico (p.ej., sufren verdaderos trastornos de personalidad), su violencia emocional será terrible, y también puede ser fácilmente física (bofetadas, arañazos, patadas, golpes con objetos, amenaza con objetos punzantes o armas, etc., e incluso homicidio). Pero, muy significativamente y a pesar de tanto dolor y odio, no suelen hacer nada para separarse de sus maridos, ni tampoco están dispuestas a renunciar a los bienes -dinero, lujos, prestigio social, amistades- que su "enemigo" pueda proporcionarle. Más aún, algunas de estas mujeres, aun pudiendo trabajar, no quieren hacerlo. O, si trabajan, guardan su dinero para sí mismas negándose a veces a compartir los gastos domésticos, con la excusa de que su pareja debe mantenerlas en "justa compensación por lo mucho que sufren por su culpa". Este tipo de actitudes demuestra claramente la psicodinámica narcisista y explotadora en todos los sentidos (emocional, económico, a veces incluso sexual) de estas mujeres . Obviamente, cuanto más dinero gana el hombre, más feroz puede ser esta explotación.

Ante semejante situación, muchos hombres buscarán consciente o inconscientemente el amor y el sexo en otra parte, es decir, tenderán a ser infieles. Cuando son finalmente descubiertos (lo que suele ocurrir, a menudo porque ellos mismos buscan inconscientemente el castigo que creen merecer), la brutalidad más absoluta caerá sobre ellos. La esposa engañada, dolida, resentida, fuera de sí, gritará: "¡ya lo sabía yo, eres un canalla, todos los hombres sois iguales, ¿quién es esa p...?, ¡ella se va a enterar!", etc.. Y escenificará todo tipo de escándalos privados y públicos, manipulará y se entrometerá en las vidas de terceros, etc. La exageración de su respuesta dependerá también de su educación y de su entorno familiar y sociocultural.

¿Son los celos o el dolor ante la posible pérdida del amor de su pareja lo que motiva estos estallidos, como ellas piensan? En absoluto. El tormento de estas mujeres es la humillación insoportable de su inmenso orgullo herido, y la no menor frustración de haber perdido el control sobre la vida y la conducta del hombre, y que otra mujer pueda asumir este dominio. Porque, si la mujer violenta necesita sentirse omnipotente, ¿cómo podría sobrevivir emocionalmente sin una víctima a la que aferrarse? Hay, pues, un fondo de terror y envidia en la furia de la engañada. Y, llegada a este punto, suele reaccionar de dos maneras básicas: o bien aumentará su odio contra la pareja durante meses (o  años, por mucho que éste se haya arrepentido sinceramente mil veces). O bien exigirá el divorcio inmediatamente. Ambas reacciones demuestran su desvinculación afectiva básica respecto al hombre, es decir, su nulo interés inconsciente por conservar un "amor" que, en rigor, nunca existió. Los procesos legales de separación tenderán a ser extremadamente conflictivos y, debido a los  prejuicios sociales y las leyes ideologizadas, a menudo cruelmente abusivos contra el varón.
Muchos hombres, naturalmente, no soportarán este infierno. Algunos buscarán alivio en el alcohol, las drogas, la prostitución, el trabajo o los amigos -dando así más pábulo a su mujer-, o desarrollarán trastornos psicológicos severos (depresión, violencia, problemas laborales, disfunciones sexuales, etc.)... sin atinar, desde luego, a divorciarse. Pese a sus tormentos y a menudo desde graves inmadureces afectivas o problemas de personalidad, son infantilmente dependientes de su verduga, a la que sienten inconscientemente como una madre justiciera que, en realidad, "suele tener razón y les da su merecido". Son hombres débiles, inseguros, inhibidos, sin autoestima (aunque puedan tener un gran brillo en lo social, profesional, etc.), y sufren en secreto sintiéndose habitualmente confundidos, culpabilizados, anulados por la esposa. Les cuesta mucho discernir qué sienten, qué piensan, qué desean hacer ellos mismos con su matrimonio y con su vida, con independencia de la voluntad de la mujer, que tienen interiorizada de forma obsesiva.

De momento, no les cabe esperar mucha comprensión por parte de la sociedad, que contempla su problema con incredulidad, ironía o indiferencia. Después de todo, ¿no es muy habitual la relación entre una mujer "de carácter" y un hombre "obediente"? ¿No se dijo siempre que ellas son "princesas" y "madres" y que siempre mandaron "en casa", mientras ellos "trabajan y pagan"? ¿Y no pensamos también que ellas son sensibles y amorosas por naturaleza, mientras que ellos son brutos, egoístas y educados para no llorar? ¿Por qué quejarse, entonces? Mientras "la sangre no llegue al río".... Por eso, social y oficialmente, el sufrimiento masculino a manos de su mujer "no existe".

Pero el tabú de la mujer maltratadora no sólo es perjudicial para los hombres, sino también, obviamente, para ellas mismas. Para las relaciones entre los sexos. Para el amor y la creación de familias. Para la crianza y la felicidad de los hijos. Para la paz y la justicia social. Etcétera. Este tabú impide a mujeres y hombres concienciar y resolver las bases neuróticas de su sadomasoquismo compartido. Las mujeres violentas, como los hombres violentos, no lo son por maldad o por gusto, sino por tremendos déficits emocionales infantiles. A causa de ello son niñas vacías, inestables, rabiosas, desesperadas. Por eso necesitan un "huésped" al que aferrarse y violentar. Desgraciadamente, muchísimas de ellas -dada la aquiescencia social- jamás advertirán su problema. Sólo sus víctimas, a veces, llegarán a pedir ayuda terapéutica y/o legal.
Dejo, en fin, estas reflexiones con la esperanza de que ayuden a arrojar un poco de luz sobre un problema muy extendido y, por negado, doblemente dramático.


© JOSÉ LUIS CANO GIL
Psicoterapeuta y Escritor
Marzo, 2008
Revisión: Febrero, 2014

© Se admite la reproducción de este artículo, citando al autor y la URL.
http://www.psicodinamicajlc.com/articulos/jlc/muj_malt.html#.VRpf3UC6xIY 

lunes, 30 de marzo de 2015

Todos Obran Cuentos...


Escribir con el corazón es la compulsión de una obsesión emotiva,
la obra de la historia insípida de un pensamiento repudiado,
el acto constante que es fin y principio del dolor presionado,
un estado de ánimo desbordado y centrado en la necesidad de cordura.







De sostenidos sonidos que no se interpretan...


Hay cierto encanto en la tristeza,
melancolía difusa,
esencia perdida de horas consentidas
y de emociones malcriadas.

Ojos que hablan de notas muertas,
de sostenidos sonidos que no se interpretan,
de cuerdas tensas sin movimiento,
silenciosas, resentidas...abnegadas.

De manos sin ganas de pensar,
rindiéndose a un mundo de  presión,
sin talento, sin inspiración, sin alma.
Historias de siempre repetir
y de nunca terminar.

(D.)

Internet duele...


¡La amistad verdadera no puede soportar
 la amargura de la separación!
¡Hasta el sol palidece cuando tiene que dejar la tierra!
(Las mil y una noches)


Vivimos en un mundo globalizado, es un hecho, la manera de relacionarnos con los demás ha cambiado de un modo súbito. Mientras el ser humano vivió en aldeas de no más de ciento-cincuenta miembros, la relaciones sociales eran estrechas, si se experimentaba un sentimiento de amistad o amor hacia ciertos miembros de la tribu, se podía acceder a ellos rápidamente para cubrir esa necesidad en muchos casos recíproca.

Hoy en día seguimos viviendo en aldeas... pero de otro modo, las llamamos ciudades, villas o pueblos donde el numero de miembros es enorme y crece de forma exponencial, en este caso podemos acceder fácilmente a las relaciones sociales, incluso nos podemos sentir abrumados por el nivel de información y lo numerosas que pueden llegar a ser así que en muchos casos el ser humano no esta preparado para estas situaciones que consumen sus recursos cognitivos a nivel social.

Por otro lado, con la aparición de Internet se solucionaba parte de este problema, se siguen teniendo las relaciones más destacadas de forma presencial y por contra las relaciones más dispersas se mantienen vía online facilitadas por redes sociales, chats y foros. 
¿Por qué digo entonces que Internet duele? Lo digo porque llega un punto donde la facilidad que implica Internet y la comodidad para el usuario consigue justo lo contrario, que las relaciones presenciales sean superficiales y las relaciones de verdadero valor sean las ciberespaciales, es entonces cuando no se puede acceder fácilmente a los miembros dado que quizá vivan a kilómetros de distancia o incluso en otros países, en este punto llegará la frustración de la emoción que no podemos expresar corporalmente, entonces dolerá y no no será agradable.

Nos ha pasado a todos/as, por suerte o desgracia somos seres gregarios, con diferentes gustos por el conocimiento o las relaciones humanas, eso implica que dentro de nuestro grupo cercano quizá no podamos saciar esas necesidades personales. Por contra Internet nos conecta con un sinfín de personas las cuales comparten nuestras inquietudes, al estrechar lazos con esas personas a través de la conversación, nos encontramos en una encrucijada, dado que florece la amistad y la confianza, una amistad que como un tipo de amor que es, necesita ser expresada de una forma más emotiva y corporal, en muchos casos se pueden hacer quedadas pero como bien sabemos, a veces es difícil de sobrellevar.
Si hablamos de amor romántico, la complejidad va a ser enorme y es entonces cuando Internet va a doler y de un modo muy intenso, porque esa necesidad, por ejemplo, de dar un abrazo se verá frustrada por la distancia, pero aunque es difícil no es imposible, millones de parejas sobrellevan las relaciones a distancia en la actual sociedad y aunque sacrifican la expresión física del afecto les compensa la idea del mismo.

El mundo evoluciona, pero los humanos por su limitación genética siguen adaptados a las relaciones sociales de un modo más reducído, este es un ejemplo de como la evolución social resulta indispensable frente y como complemento a la evolución genetica.


La amistad es un alma que habita en dos cuerpos;
un corazón que habita en dos almas.
(Aristóteles)



viernes, 27 de marzo de 2015

Las ventajas de la soledad.


“Nunca sentía soledad;
 cuanto más separado de la especie humana se encontraba,
 mejor se sentía.”
(Charles Bukowski) 

La soledad, una situación que produce mucho miedo pero no porque sea peligrosa, sino porque nos deja a solas con nosotros mismos. 
Uno de los grandes problemas de la sociedad actual es que sus miembros no han aprendido a gestionar la soledad de forma optima y por consiguiente a disfrutar de sus ventajas.

Vamos a empezar por el principio, la soledad vista desde la perspectiva genética y evolutiva. Claramente, la soledad difiere con una parte de la naturaleza humana y no es otra que la protección que proporciona el grupo. Si nos alejamos del grupo, por instinto sabemos que no sobreviviremos, hasta el punto que se genera una necesidad genética hacia la socialización, por ello el ser humano es gregario. Solo hay un problema con este tema... que aunque es cierto, ya no vivimos en el paleolítico y por consiguiente, debemos adaptarnos a un mundo en el que la soledad no significa "muerte" de una forma tan definitoria ni contundente, así que debemos intentar trascenderla en la medida de lo posible, porque jamás podremos huir de la necesidad de ser gregarios ni de tratar con otros seres humanos.

Visto este punto debemos decir que existen dos tipos de soledades, la elegida y la obligada. La elegida es aquella que practican las personas introvertidas o de carácter más reservado además de artistas, escritores y creativos, que la necesitan para conectarse con ellos mismos y así dar fruto. Por otro lado, existe la soledad obligada, sea por falta de relaciones sociales, timidez o miedos, que llevan a las personas a estar más solas de lo que verdaderamente quieren estar, esto sucede a menudo en los duelos, sobretodo en los de la perdida de la pareja por ruptura y/o perdida.
Sea cual sea el tipo de soledad que vivimos podemos sacarle el mismo partido realmente, en general la soledad no debe estar asociada a la tristeza o al miedo,si se asocia es por error dado que suele llegar conjuntamente con los momentos de tristeza y por ello explicaremos más adelante su relación.

Sí por contra atendemos a esa soledad, y la sentimos, nos encontramos con nosotros mismos en toda plenitud, sin máscaras, donde no podemos retirar la mirada ni de lo bueno ni de lo malo que podemos ocultar a los demás pero no a nosotros mismos... de ahí el miedo y el dolor que se siente en la soledad y por ello se alejan de ella las personas.
Si nos atrevemos a no apartar la mirada, crecemos, porque se nos da la oportunidad de ser conscientes y corregir todo aquello que no nos gusta de nosotros, o si más no, aceptarlo e intentar sacar su parte positiva...

Eso es la introspección y practicar una inteligencia intrapersonal.

Os puedo asegurar que el camino que la soledad nos ofrece es muy duro, pero si tenemos el valor de afrontarlo, es entonces cuando al final da un fruto que nos libera de esas cargas que no queremos reconocer. Quizá muchos os preguntaréis porque en la tristeza queremos estar en soledad, y con esto tenéis la respuesta... la tristeza nos dice que nos conectemos con nosotros mismos para resolver aquello que nos la genera, para así afrontarlo y trascenderlo.

Por último diré, que como en casi todo nada es absoluto, y aunque la soledad es importante vivirla, quedarse en ella permanentemente nos aísla. El ser humano tiene una necesidad tanto social como individual, y debe mantener un equilibrio entre ambas necesidades o polaridades si quiere mantenerse feliz, dado que si no cumple una de las dos, sentirá como la necesidad insatisfecha lo oprime, de ahí que la solución recaiga en dar espacio a ambas necesidades y así equilibrarlas.

Sócrates decía aquello de ''conócete a ti mismo'',
 y no nos vamos a engañar, el camino más rápido es la soledad.
 Si os hacéis conscientes de ello no queda más que aprovecharlo.


La mariposa recordará por siempre que fue gusano. (Benedetti)

martes, 24 de marzo de 2015

Abrazos inteligentes.


Amo a la humanidad, pero, para sorpresa mía, 
cuanto más quiero a la humanidad en general, 
menos cariño me inspiran las personas en particular. 
(Dostoievski)

Vivimos en un mundo donde mostrar cariño se asocia a la debilidad, a la dependencia de los otros y por consiguiente no permite ser un ente competitivo, consumista y sobretodo independientemente rudo.
Creo que por el camino de estos últimos tiempos mercantilistas, hemos perdido parte de nuestra humanidad, la capacidad de mostrar ternura en público, un tipo de amor que libera como pocas cosas.

Tú al abrazo lo llamas debilidad, yo por contra, lo llamo inteligencia de tipo emocional-interpersonal, porque saber pedir cariño, como una necesidad básica del ser humano que es, a mi, me resulta un acto de inteligencia y no de esa que se mide con un test.

Queda mucho por saber de la ternura, pero una cosa esta clara a mi entender:

"Los abrazos de verdad duran más de seis segundos...
y los mide el valor, porque no tienen precio."
(D.)


No hay que entenderlos, sencillamente solo hay que ofrecerlos.

lunes, 23 de marzo de 2015

Día plomizo y tripofóbico.


Día plomizo y sobrio, gris, pendenciero y abrupto,
el cielo terroso olía como la fruta ulcerada, purulenta y rancia,
caminaba por la calle descompuesto, tordo...
con ganas de pugnar y desafiar a todos.

Podia notar la tristeza en la garganta,
y como el aire en su aguante sabía a vómito.
La vida era sucia y churretosa,
como el agua corrompida de las aceras,
ruin, fulera y pringosa en la lengua de lo gatos,
que perduraban recurriendo a la carne tripofóbica
de los lamentos de la piel humana.

Ya no soportaban no poder huir
de esa realidad caduca de rojos y ocres.





¿Victima o victimismo?


 Para llegar a una vana pompa y a un poder prohibido, 
se había ennegrecido con mil crímenes, 
se ve presa de remordimientos y víctima de un dolor 
sin fin y sin límites.
 (William Beckford)


Cuando hablamos del dolor que sentimos en algunas situaciones, difícilmente podemos trascender la idea de aquello que nos lo provocó. Siempre se buscas un "porqué", un motivo que justifique ese dolor que tanto sufrimiento provoca.

Hay una gran diferencia entre ser una víctima real, y quedarse pinzado en el victimismo, dado que el uno mal gestionado se convierte en el otro. La víctima es aquella persona que ha sufrido un daño quizá injustificado o colateral y que sufre por el mismo con un dolor justificado y una tristeza lícita que le ayude a gestionar aquello que ha perdido, sea dignidad, libertad o cualquier otra cosa valorable por el ser humano. Pongamos un ejemplo para ello y veamos como a veces las víctimas lo son incluso generaciones despúes:

- Si entendemos que nuestros bisabuelos y abuelos vivieron una guerra civil en la que sufrieron y fueron victimas de situaciones durísimas de muerte y hambre, entonces podemos entender que entraran en un modo de supervivencia para el resto de sus vidas basado en la escasez, claramente eso afectó a la educación de nuestros padres, que a su vez vivieron una dictadura represiva donde la represión de la libertad y el miedo eran norma siendo víctimas de su educación influenciada por una guerra y de su vida influenciada por una dictadura... a su vez, nuestros padres nos transmitieron una educación, en muchos casos patriarcal, controladora y basada en el miedo al miedo, dada sus propias experiencias y por contra nuestra generación esta adaptada a un mundo que ya no existe, una democracia mercantilista que rompe con muchas de las normas naturales del ser humano... 
Como podemos ver, somos "víctimas reales" e indirectas de una guerra, una dictadura y más tarde de un sistema económico que nos trata como mercancía y debemos, desde luego, aprender a gestionarlo. En ese caso tenemos dos opciones, aceptar la realidad (que no implica que nos deba gustar) y intentar adaptarnos mejorando el ambiente y a nosotros mismos para romper el círculo de "educación neurótica" y que permita a nuestros hijos e hijas, ser ellos mismos sin una influencia del pasado que ya nada tiene que ver con su realidad.

Por otro lado, podemos no aceptar la realidad como tal y el daño producido como algo que no nos impulse a crecer... lo que hará que pongamos la queja en que son otros/as los responsables de nuestro dolor, cosa que nos nos permitirá resolverlo. En ese punto nos quedaremos pinzados en un estado continuado de dolor, rencor e injusticia que nos llevará al deseo de venganza continuado... entraremos en un estado victimista.

 El dolor es inevitable, el sufrimiento opcional... esa es la perspectiva contraria del victimismo, cuando aquello que produce el daño desaparece, debemos entender que es tiempo de lamer las heridos, pero hay quien no lo hace. El victimismo tiene una función biológica clara, la de hacer ver como agresor aquello que nos produce el daño y a su vez manipular al grupo para que por empatía se vuelquen en el individuo victimizado y lo protejan, un método sublime de supervivencia social. Aún así, hay que entender que el victimismo, como patología destroza a su huésped y lo lleva a un estado paranoide, donde la realidad se deforma. A eso lo llamamos sufrimiento sostenido.

Este es un caso fácil que podemos encontrar en trastornos depresivos agudos, la depresión no es otra cosa que odio reprimido y no expresado hacia aquel factor que provoca el daño, la culpa por no haber frenado el daño antes o haber provocado a otros y no poder resolverlos a su vez... la tristeza, una profunda tristeza producto de la impotencia de acto de la que no se puede escapar más que aceptando la realidad y asumiendo la responsabilidad de la misma para resolverla.

Cuando existe un estado depresivo, la función de la tristeza es conectar a la persona con si misma para que pueda resolver el conflicto interno, si eso no sucede, la tristeza se alarga y la persona comprende en su impotencia que dependerá de los demás para sobrellevar su sufrimiento, en ese momento caera en el victimismo y que junto con su manipulación influirá en la empatía de las personas para que la rescaten de su dolor y así sobrevivir en un entorno, que la misma creerá hostil por su experiencia previa.

Como podemos ver la victima lo es temporalmente y el/la victimista se queda enganchado/a a su dolor que sin lugar a dudas es su condena. La solución no es sencilla, pero con trabajo y asumiendo la realidad, se puede salir de esta espiral de dolor, lamento y queja, que hoy padecen tantos hombres y mujeres en nuestra sociedad, pero ese será otro tema que tratar en el futuro.



P.D.- Escribo sobre un caso específico y común, pero que no debe ser algo absoluto. Calce a quien le calce y a quién no, escucharemos su versión.

miércoles, 18 de marzo de 2015

Seamos.


Porque el mejor regalo que nos ha hecho la vida es la muerte. Y la certeza de que nadie, absolutamente nadie se acordará de nosotros.
Dicho de otro modo: seamos.
Tenemos la coartada perfecta.

(José Miguel Campos - Hoy no debería pensar en nada)

martes, 17 de marzo de 2015

Héroes.




No te pongas piedras en el hígado... los verdaderos héroes, hoy en día tienden lavadoras. (D.)

sábado, 14 de marzo de 2015

¿Sapiens? No, muchos no merecen ese apelativo...


El hombre es el lobo del hombre...
(Asinaria, Plauto)

El ser humano, ese animal que por miedo altera el entorno. Ya no se adapta a él, sino que adapta el mismo para sentir seguridad y así no enfrentar su miedo más instintivo a vivir.

Es un animal que no recuerda que estar en equilibrio con el medio es lo único que verdaderamente le va a salvar, porque alejarse de él implica negar el cambio, siendo justamente el cambio el que crea la leccion, el aprendizaje y el hecho de convertirse en algo diferente, transformarse...

Ya lo he dicho, miedo, miedo al cambio, miedo a dejar de ser estáticos para olvidar y no reconocer justo lo que son... animales, nada más.
Es en esa situación incongruente, lo que ellos llaman el proceso de cambiar el mundo que les rodea, acaban destruyendo su entorno... he ahí cuando se pone en duda el apelativo sapiens, donde su inteligencia se merma y se pone por debajo de la de cualquier otro ser vivo del ecosistema. Por desgracia, otros seres que si están en equilibrio con el hábitat,  se extinguen por la proliferación del cromañón vírico.

Imbéciles que son incapaces de ser conscientes de un hecho tan simple, estúpidos simios que no saben usar con consciencia su arma más poderosa, que es su cerebro único, imperfecto, pero único. 

Pero no temáis por el mundo, por el planeta, no acabarán con él porque no pueden, quizá arrasen con otras especies que en otra circunstancia podrían ser su salvación, también con los árboles que les dan oxigeno, pero no, nunca acabarán con la vida... la Tierra, como tal, ha sufrido ya seis extinciones masivas y de todas ellas se ha recuperado, la vida a vuelto a florecer una vez tras otra... no os equivoquéis, lo único que hace el sapiens es destruirse a si mismo porque su entorno, se recicla y recupera una y otra vez.

Autodestrucción... ni más, ni menos, ese sitio donde no queréis mirar.


Sentir vergüenza de tu especie...
 

viernes, 6 de marzo de 2015

Lágrimas viscerales.


Las lágrimas son la expresión de todas las emociones básicas: se llora por tristeza, por alegría, por miedo y por rabia... pero aún así, la sociedad se empeña en reprimirlas considerándolas una debilidad... nos niegan el derecho a ser lo que somos, seres puramente humanos, entes emocionales... animales viscerales.

Las necesidades instintivas deben ser satisfechas.




domingo, 1 de marzo de 2015

Resaca emocional...

 El lobo y la oveja, nunca hacen pareja...
(Refrán popular)


Aclaremos entonces conceptos sobre la ex-pareja...

Veo a muchas personas luchando contra una evidencia aplastante, y sintiéndose inseguras frente a las ex-parejas de sus actuales parejas...

Pero este es un tema sencillo para quien mantiene la mente abierta, porque hay que rendirse a la "resaca emocional" y no seguir de "borrachera afectiva"... preguntándonos: ¿Qué es una ex-pareja?

Much@s diréis, que es ese "ser" enemigo por naturaleza, al cual amó vuestra actual pareja antes que a vosotr@s, y que "como es normal" es una amenaza constante hacia vuestra relación actual... pero va a ser que no y no es así, es más sencillo que todo eso. Si piensas así, te inunda la inseguridad, empieza el miedo a la perdida, que crea una posesión que lleva a los celos y al final a la dependencia emocional... cayendo en barrena, para terminar, al apego más sumiso y carcelero.

Por contra, esas personas en raro caso esperan algo de vosotros o vosotras, siguen con su vida felizmente como el resto de los mortales, es más, la manera más sana de verlos es la siguiente:

"Ex-pareja es aquella persona a la que debemos estar agradecid@s por todo lo bueno que hizo por nosotros, por hacernos sentir amor, ternura, erotismo, hacernos sentirnos queridos y sobretodo por compartir nuestra vida por un tiempo y nutrirnos para permitirnos crecer... 
A su vez, debemos estar agradecidos por todo lo malo que nos hicieron pasar, el dolor, la tristeza, el miedo, etc... y las lecciones que nos hicieron aprender a través de estas emociones... pasará lo mismo con las ex-parejas de nuestras parejas actuales, debemos y podemos agradecerles el hecho que ayudaran a nuestras parejas a aprender a "amar cada día un poquito mejor" cosa de la cual nos beneficiaremos nosotros, y soltarlas, para de ese modo ponerlas a nuestro alcance..."

Con cada nueva relación de pareja,
aprendemos a amar un poco mejor cada vez,
y eso, siempre es un beneficio.
(Joan Garriga)

Debemos recordar que en esta vida siempre vamos a más, siempre intentamos encontrarnos a nosotros mismos, recoger lo que otros dejan es una ventaja, y por ello, cuando nosotros dejamos algo, no debemos sentir inseguridad por saber que otros/as lo cogerán... es más, nos alegramos que alguien pueda disfrutar de con quien ya no encajamos y por suerte nos desapegamos, es realmente puro altruismo, ofrecer libertad a otras personas para que libremente encuentren el amor y permitirnos encontrarlo nosotros/as.

En conclusión, ex-pareja, es un concepto y un rol personal muy positivo, valorable y necesario, que hay que apreciar con madurez, porque nos ayuda a crecer, aunque muchas veces y un gran numero de personas no se den cuenta, las personas que compartieron sus vida, son a su vez una bendición por el placer y una lección sobre que mejorar la próxima vez.

Por otro lado, esperar amistad de nuestra ex-pareja, es algo muy complicado... cuando hay mucho amor, también hay mucho odio en la ruptura, por ello lo que de una forma realista se debe esperar de una ex-pareja es indiferencia, porque esa indiferencia es lo que realmente la define y la que nos enseñará una gran lección, que implica que no podemos ser "necios", la amistad, es para los amigos... La ex-pareja tiene y debe tener otro papel más fundamental aún, facilitar el proceso de cambio emocional con su indiferencia, que lleva a conseguir un desapego rápido, enriqueciendo dentro del duelo y facilitar una gestión más rápida de la perdida, entendiendo una verdad universal, nada es permanente, ni siquiera la mejores historias de amor.

"Los grandes amores, 
conllevan siempre grandes dramas..."
(D.)

Por último, cabe decir que muchas personas, miran en su pasado y no valoran a quienes compartieron sus vidas, despreciando y desprestigiando a personas que quizá se lo dieron todo y más, y este es un error enorme, porque hay que agradecer a la ex-pareja todo lo que nos ha brindado, no hacerlo, implica no seguir adelante, y negarte una experiencia muy enriquecedora para el futuro... el tiempo nunca es perdido.

El odio siempre es un error es estos casos y una perdida tiempo, donde mucho más lo son las ofensas que vuelan como golpes.





P.D.- A mi amigo J. al que estoy seguro le abrirá la puerta a otra perspectiva.

viernes, 27 de febrero de 2015

Polaridad social.


"Relaciones personales desequilibradas,
polaridades sociales corregidas."


Como de costumbre, las relaciones sociales, sean de amistad, amor, laborales, joviales, familiares, por placer o provecho, deben tener sean cuales sean una premisa máxima, la reciprocidad.

Es una de esas cosas, sea por empatía, curiosidad o estudio, en las que me fijo muchísimo y veo lo desequilibrado de las mismas. Las personas son capaces de aguantar lo que esta escrito por "seguir perteneciendo al grupo", quizá solo unas pocas personas son capaces de entender la polaridad entre la individualidad y la colectividad.

No podemos vivir siempre solos, ni siempre acompañados, por ello nos debatimos siempre entre un estado de conflicto sobre dos necesidades que debemos satisfacer para equilibrar y eso solo se consigue, dando espacio a lo individual cuando lo necesitamos y complaciendo lo colectivo cuando así nos lo pide el cuerpo, difícil tarea.

Como esa polaridad indica, quedarse en lo individual sin ganas genera un sentimiento de soledad, en cambio mantenerse en lo social cuando no conviene o no apetece, genera un sentimiento de rabia que si más no, nos aleja de esa situación. Es tan fácil como escuchar a las emociones que nacen en nuestro cuerpo y ejecutar una vía de acción.

La conclusión es sencilla, si sientes soledad, muévete, interactua, sal de ti mismo o misma. Si por contra, vives relaciones sociales que no son equitativas o no son reciprocas y te sientes dañado o dañada... escucha esas emociones, quizá es el momento de alejarse de esas relaciones y volver a conectar contigo mismo/a o con personas que verdaderamente puedan aportarte un enriquecimiento personal.

Hasta el corazón más amable, se cansa de la impertinencia.
Hasta el corazón más amoroso, se cansa de la indiferencia.
Hasta el corazón más compasivo, se cansa de la desfachatez.
Hasta el corazón más amigable, se cansa de las malas acciones.

Podemos dar y dar, y seguir dando bondad al mundo, pero llega el día que nos cansamos de no recibir y es entonces cuando entendemos que nuestra energía también es limitada y elegimos orientarla hacia nosotros mismos, entonces comprendemos que no es egoísmo, sino autoestima sana porque cada uno es responsable de su felicidad. Al final, los filósofos clásicos no dejan de tener razón:

"La amistad es una sola alma que habita dos cuerpos."
(Aristoteles)


No temas a la soledad, abrazarte a ella te permitirá conocerte a ti mismx. No temas a los juicios sociales, realmente no  necesitas a aquellos/as que te juzgan sin intentar ni siquiera comprenderte.

jueves, 26 de febrero de 2015

Romanticismo apandrico.


Enamorarte de una mujer,
porque sus ojos parezcan tristes cuando sonríe,
porque su olor se asemeje al de la naranja amarga,
porque sea cuántica existiendo y no existiendo a la vez,
porque los rizos de su pelo irradien rebeldía,
porque al andar descalza la intimidad sea un rastro,
porque al mirarla, sientas que vuelves a tener quince años...
 
...pero entonces recuerdas su apandria,
y entiendes que las mujeres como ella,
aborrecen tener coño...



Solo los amores imposibles son románticos,
una historia que nunca termina, es la jamás empieza.


sábado, 21 de febrero de 2015

¿Autor o lector?


No dejo de pensar en lo diferente que es un texto según con que dirección lo escribimos, cuando es para nosotros mismos desemboca una emoción, aún no esta plasmado y ya sentimos la idea de su sustancia... entonces lo escribimos con el corazón y luego lo reescribimos con la mente pensando en el lector, y para cuando lo releemos para darle los últimos toques, ya ha perdido todo el carácter y la sensación de propiedad que lo caracterizaba.

En todos nosotros hay un autor y un lector, pero no creo que sepan coexistir de forma simultanea.


viernes, 20 de febrero de 2015

Envejecemos... por suerte.


Vieja madera para arder, viejo vino para beber,
 viejos amigos en quien confiar, y viejos autores para leer.

 (Sir Francis Bacon)

Hoy quiero hablaros sobre la vejez y el concepto psicológico actual que tenemos de la misma, tanto a nivel humano como a nivel de objeto y también tanto a nivel ético, como estético.

A mediados del siglo XX se olvidaron los valores de la vejez junto al concepto capitalista. Pero la vejez y sobretodo el concepto de envejecimiento, esta muy asociado a la sabiduría y el buen hacer, aunque no en todos los casos. A nivel fisiológico se desarrolla lo que llamamos inteligencia cristalizada, un tipo de inteligencia basado en la experiencia adquirida con la vida, más interpersonal, intrapersonal y social... vaya, el cerebro se adapta a la propia vida dado que se pierde capacidad de inteligencia matemática y de cálculo, compensándose con el conocimiento experiencial.

¿Es mejor la vejez que la madurez o la juventud? No no lo es, es una fase más que vivir, pero negarla sin duda es un error enorme.

La vejez existe cuando se empieza a decir: nunca me he sentido tan joven.
(Jules Renard)

La vejez es un fase más, y es cierto, implica un deterioro físico, pero como dice Renard no implica no sentirse joven... las personas mayores, también fueron jóvenes, lo recuerdan y han extraído toda esa esencia y experiencia (han tenido mucho tiempo para hacerlo)... mal no haríamos de escucharlos y luego juzgar por nosotros mismos la vida. Al final, todos tenemos unos rasgos, una forma de ser, como ya he dicho una esencia, y esa esencia, con los años, no hace más que crecer. Si la adquirimos de forma consciente, mejoraremos, desde luego no podemos ser perfectos, pero si podemos mejorar todo aquello que no nos guste de nosotros, de eso se trata envejecer, de mejorar y de vivir... por eso como diría Charles Augustin Sainte-Beuve:

Envejecer es todavía el único medio que se ha encontrado para vivir mucho tiempo.

Sobre la estética de lo material, que puedo deciros... vivimos en una sociedad ciega, que asocia lo nuevo con el concepto de "ser mejor". Pero lo nuevo no siempre es mejor, porque no nos lo ha demostrado... En cambio, lo viejo con el tiempo y el uso, siempre nos demuestra su valía. ¿Cuantas personas tienen coches de más de diez años muy cuidados, y que los adoran porque jamás les han fallado en su función? Muchísimos, ahora bien, ¿cuantas de esas personas son conscientes de esa verdad? Bien pocas y todas ellas están deseando comprar una nuevo... porque lo viejo, al ser viejo requiere de más cuidados, requiere de más atención, pero nos da la confianza, sabiendo que un día morirá, pero que hasta ese día si lo cuidamos, no nos fallará en exceso, porque claro, nada es perfecto. Eso, si tiene verdadero valor, ¿cómo deshacerse de un objeto así? Un objeto que nos ha ofrecido tanta utilidad? Yo no lo haría...
Al final todo es extrapolable, dime como tratas las cosas viejas y te diré como tratas a la personas que consideras viejas... si un coche viejo, que tanto te ha dado, no tiene valor, tampoco lo tendrá una persona por más que haya hecho por ti...

Muchas personas no cumplen los ochenta porque intentan
 durante demasiado tiempo quedarse en los cuarenta.
(Salvador Dalí)

Respecto a las personas... que decir... lo viejo para nuestra sociedad es poco atractivo, las arrugas son malas, cumplir años también es deprimente, pero nada más lejos de la verdad, es lo que nos hemos vivido lo que nos hace más o menos viejos. Veo cada día gente de "ventipocos" más viejos que algunos de "cuarentaymuchos" porque tal como decía Montaigne: Són las arrugas del espíritu las que nos hacen más viejos que las de la cara... y es totalmente cierto, y os diré porqué.
Yo siempre digo que mientras eres joven, lo tienes todo en sus sitio y estás esculpido en madera... ¿cuales son los motivos para pensar en la vejez? Muchos y ninguno... pero quien lo hace, quien se pregunta más allá, puede aprender a envejecer y quien no lo hace, construye su autoestima sobre algo efímero que pronto desaparecerá, como es la belleza física. Yo tengo un buen amigo que dice que cuando aprendes las lecciones de la vida, ya han pasado las oportunidades de hacerlo bien... envejecer de forma consciente, nos permite adelantarnos a esa idea y con ello, mejorar nuestra calidad de vida.

Yo solo se, que son las arrugas de mi frente las que me dicen lo mucho que me he enfadado, lo mucho que me he preocupado y lo mucho que he fruncido el ceño en la vida, y que tengo que dejar de hacerlo, son las de mis labios, las que me dicen lo mucho que me reído y que debo seguir haciéndolo, porque sin ellas, no podría recordar esta verdad tan a diario. (D.)

Y si no os quedáis contentos, solo os diré lo que decía Pavese, que es mucho menos triste envejecer, que seguir siendo un niño toda la vida... podemos negar el dolor, las emociones, el enfado, la tristeza y así no cultivar arrugas... pero que triste es seguir siendo un niño y no haber vivido la vida, al final envejecer es obligatorio, crecer es opcional.

También cabe remarcar que a nivel biológico y evolutivo los rasgos de la edad también tienen su función. A nivel sexual, en hombres, es un rasgo muy apreciable entre mujeres, un ceño fruncido, canas y marcas de edad como la calvicie, indican que se ha "sobrevivido" y eso siempre es una ventaja evolutiva y por suerte o por desgracia, estamos programados con esas premisas, de ahí que los hombres maduros, sean preferibles por las mujeres para formar una familia y tener hijos. Con las mujeres pasa lo contrario, una piel tersa, perfecta, sin arrugas, determina juventud y la juventud determina un embarazo fácil, por ese mismo hecho, instintivamente los hombres pueden verse atraídos por mujeres más jóvenes dado que les facilitarán la función reproductiva.
De todos modos, el peso de la genética hoy en día no es razonable, ni una mujer necesita ser protegida, ni un hombre necesita procrear continuamente y además, con lo avanzada que esta la fisiología, una mujer puede tener hijos de forma sana hasta muy avanzada edad.
Con esto quiero deciros, que si sois capaces de trascender lo que vuestro inconsciente más instintivo os dicta, podréis liberaros de ser unos esclavos de la genética y empezar a decidir que queréis y que no queréis a nivel sexual/amoroso de una persona, independientemente de sus edad y desde luego, ser felices con ellos/as.
Al menos, yo siempre digo, que son las personas más experimentadas en la vida, las que mejor saben amar y que ya han cometido los errores suficientes para no volver a cometerlos.

¡Envejece conmigo! Lo mejor está aún por llegar.
(Robert Browning)

Por último solo os diré que el pelo y las tetas se caen... que no podéis luchar contra la gravedad, quizá si relentizarlo, pero de una forma natural jamás lo podréis evitar... asumidlo, del suelo no pasarán y aprended de ello, porque envejecer, os dará muchas alegrías y os ofrecerá muchas lecciones. A mi entender la cirugía estética es negarlo, hay que cuidarse sí, pero no estamos hechos para ser eternos, esa es la realidad.




P.D.- Yo también he tenido tres años, y nueve... y también quince, he sido adolescente pero también he llegado a los veinte y los veintitrés donde he podido descubrir la juventud y seguido he llegado a los veintisiete y hoy estoy rozando los treinta y dos... sintiéndome cada vez más cerca de la madurez... y me siento afortunado de ser consciente de todo esto siendo aún tan realmente joven como soy... es un privilegio poder envejecer de forma tan consciente.